Scelsi Edition 10-The Violin Works
Weiping Lin, violin
1. Divertimento No. 4 (1955) 15:53
2. L’âme ailée – L’âme ouverte (1973) 7:34
3.Divertimento No. 2 (1954) 12:16 FIRST RECORDING
4.Xnoybis (1964) 10:05
5.Divertimento No. 3 (1955) 11:04
This is the first complete recording of Scelsi’s works for solo violin. They span from the earlier “Divertimenti,” in his more traditional virtuoso style, to the two later works which find Scelsi exploring the sound “inside of the note.”
Divertimento No. 2 receives its first recording here (Divertimento No. 1 has never been found).
Taiwanese born violinst Weiping Lin is Assistant Concertmaster of the Austrian Broadcasting Corporation Radio Symphony Orchestra Vienna (RSO-Wien) and a well-respected violinist for contemporary music. Ms. Lin has performed numerous premieres. As a chamber musician and soloist Ms. Lin has performed numerous concerts in countries throughout Europe and Asia, playing with ensembles such as Ensemble Modern, Ensemble die reihe, Ensemble 20. Jahrhundert, Ensemble EIS and Zur Eisernen Zeit.
The recording was produced by Scelsi specialist Sharon Kanach.
Liner notes by Walter Weidringer.
Reviews
Un violín, dos Scelsi(s)
Desde el año 2000, el sello mode tiene en el enigmático Giacinto Scelsi (Pitelli, 1905 – Roma, 1998) a uno de sus compositores de cabecera. Al aristócrata italiano ha consagrado, con este, diez volúmenes en los que repasa desde su música para piano hasta su obra orquestal, con los habituales estándares de excelencia interpretativa de la discográfica neoyorquina.
En esta décima entrega de la serie nos acercamos a su música para violín solo, a través de cinco partituras que comprenden tres décadas de producción scelsiana; páginas interpretadas por la violinista Weiping Lin, en lo que es el primer álbum dedicado íntegramente a la obra para violín del trasalpino (teniendo en cuenta que el desordenado modo de producción y conservación de los originales de Scelsi podría depararnos en el futuro conocer nuevas partituras para este instrumento). La obra más antigua de este recorrido es el Divertimento Nº2 (1954), que escuchamos en lo que mode afirma primera grabación mundial. A día de hoy, el Divertimento Nº1 no ha sido encontrado, por lo que la serie arranca en esta página, poco antes de que Scelsi reorientase su estética con la inmersión en la escritura microtonal, adentrándose en la interioridad del sonido. Lo que aquí nos encontramos es un violín desenfadado, más abierto al fraseo, a la melodía, a los ecos orientales, tan queridos por Scelsi, que deparan cierto exotismo en una partitura de un virtuosismo no menor, en la que la alternancia pizzicato/arco, las dobles cuerdas, armónicos, etc., generan una proliferación de gran efecto.
Tal y como Walter Weidringer nos refiere en el libreto de esta edición, los sucesivos Divertimento Nº3 (1955) y Divertimento Nº4 (1955) continúan esa línea de gestos virtuosos que por momentos parecen abrirse a la improvisación, con un carácter entre el capricho y el scherzo que nos remite a la tradición clásico-romántica de este instrumento, en la que se pueden inscribir estas piezas, sin olvidar los ecos de la música popular italiana, tan presente en el primer Scelsi; un compositor que, poco a poco, habría de sumar lo más arcaico y ancestral de diversas culturas del planeta a una música que se iría reorientando hacia lo atávico, hacia lo ignoto, hacia regiones que siguen haciendo de su creación una de las grandes desconocidas del siglo XX, a pesar de las ya abundantes ediciones (Salabert) y registros fonográficos (mode, Accord, Kairos, col legno, Montaigne, CPO, Wergo…) que de sus partituras se han realizado.
Otro universo sonoro es el que se despliega en Xnoybis (1964); difícilmente se puede reconocer al compositor que había firmado los Divertimenti. Lo que ahora escuchamos es esa ya citada interioridad del sonido, analizada a través de un insistente ir y venir del arco sobre las mismas alturas, que se exploran por medio de sutiles modulaciones dinámicas, cambios de articulación y ataque, vibrato, leve roce de dobles cuerdas, pizzicati diseminados en cuerdas colindantes como contrapuntos puntillistas de exiguas pinceladas al trabajo continuo del arco buscando los perfiles de cada tono, sus colores, en una suerte de máxima concentración de la klangfarbenmelodie schönberguiana, explotada más que en timbres (pues no abandonamos el violín) en colores desplegados desde una melodía de exiguo recorrido, lacónica y parca, que apenas abandona una altura, pero que la ataca y esculpe hasta saciarse de todos sus perfiles; y, sin embargo: exploración sin fin que muestra la inabarcable riqueza del sonido instrumental, su inagotable capacidad para producir microvariaciones, pequeños detalles que hacen cada modulación de un color un nuevo matiz que enriquece nuestra mirada, que expande nuestra percepción. Giacinto Scelsi, tal y como también afirmaba Andréi Tarkovski del plano-secuencia cinematográfico, cree que a mayor duración de una sonoridad levemente variada, que podríamos creer la misma expuesta sin descanso, tras un periodo de cierto distanciamiento, da lugar a un interés mayor, a un volcar nuestra atención en ese juego de inagotables detalles que proliferan en lo que en una primera audición podría parecer monotonía y repetición. Xnoybis resulta, a este respecto, paradigmática.
L´âme ailée – L´âme ouverte (1973) surge, una década más tarde, de la misma estela conceptual que Xnoybis, con la cual forma una compacta unidad en estilo. El sonido es más agudo y estable, las dobles cuerdas se han hecho más compactas y su resonancia se amalgama, el canto del violín se transubstancia en pura espiritualidad. Retirado aquí el pizzicato, el arco es el gran protagonista, al tiempo que una afinación tremendamente exigente, basada en una digitación que ataca octavos de tono para radiografiar determinadas alturas en la más nimia interioridad de sus rangos.
La violinista taiwanesa Weiping Lin afronta estas partituras con una técnica sobresaliente, ya sea los concentrados y serenos pasajes del segundo movimiento del Divertimento Nº3 o del tercer movimiento del Divertimento Nº4, en los que una impoluta afinación mantiene las tesituras de su instrumento con total pulcritud y limpieza, recogidas sobre sí mismas; o en los casi antitéticos movimientos conclusivos del Divertimento Nº2, tan vívidos en su lectura, con un pizzicato firme y bien resonante, y un canto de las dobles cuerdas que confieren una sonoridad camerística a su violín, que prácticamente parece desdoblarse en un dúo, algo que también escuchamos en el danzante y agitado segundo movimiento del Divertimento Nº4. Palabras mayores, en cuanto a dominio del arco y la afinación, representan Xnoybis y L´âme ailée – L´âme ouverte, y de ello da cuenta Lin con una pulcritud digna de alabanza, en páginas de enorme exigencia, en las que una leve desviación de los microtonos señalados por Scelsi desbarata el edificio sonoro, su concentración y precisión, rompiendo la unidad y su sobreexplotado desarrollo. Soberbia, Weiping Lin, en estos dos mundos en cuanto al estilo que suponen ambos bloques de partituras, ambos Scelsi(s).
La grabación, realizada en el 4Tune Studio vienés, es impecable desde cualquier punto de vista, con un sonido transparente y cálido. El libreto del compacto está firmado por Walter Weidringer, y en su ensayo se acerca de un modo general a la música de Scelsi, a la importancia que en el italiano adquiere la contemplación de cada sonoridad, su desarrollo y evolución cuando la audición de éstas se dilata en el tiempo, para lo cual recurre a diversos comentarios del propio compositor, relacionados con una cosmovisión notablemente influenciada por la filosofía oriental. Todo ello nos permite conocer una región de su música poco transitada, pero que, como casi todo su catálogo, esconde muestras de una profunda sabiduría.
Este disco ha sido enviado para su recensión por mode records
— Paco Yáñez, mundoclassico.com, 5 May 2014